EL COMUNISMO Y LA PANDEMIA

- abril 24, 2020

Missouri demandó a China por causar la pandemia de coronavirus ...

Así como el comunismo ruso capitalizó muy bien su participación en la Segunda Guerra Mundial para someter por la fuerza a la Europa Oriental; de igual forma, el comunismo pretende ahora capitalizar los efectos de esta pandemia para lograr por el miedo y la destrucción económica lo que no pudo hacer a través de su revolución violenta: la conquista del poder global. Es por eso que vemos que los más felices con la extensión de las cuarentenas son los partidarios de Marx.

Más allá de que si el COVID-19 fue creado o tiene un origen natural, hay un responsable principal del dolor que experimenta el mundo a causa de su propagación, se llama: Partido Comunista Chino. Cúpula que continuando con el legado marxista, gobierna china sin ningún tipo de oposición, y que, al tener el monopolio de la información y la internet, impidió de todas las formas posibles (arrestando incluso a médicos) que la información del nuevo Coronavirus llegué a tiempo al mundo entero. El mismo que, según afirman los especialistas, habría empezado a detectársele en noviembre del año pasado y no desde diciembre como se afirmaba.

En este ínterin, el comunismo chino contó con la complicidad de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Esta organización internacional es responsable, no sólo por no haber advertido a tiempo al mundo sobre la propagación del nuevo coronavirus, pese a que países como Taiwán se lo comunicaron de forma oportuna, sino también, por haber confiado demasiado en el régimen de Xi Jinping. Además, fue esta misma organización, la que en enero de este año, a través de su presidente, el Sr. Tredos (partidario comunista), rechazó las medidas preventivas adoptadas por Donald Trump al restringir los vuelos desde la China y Europa, bajo el argumento que estas medidas pueden "tener el efecto de aumentar el miedo y estigma, con pocos beneficios para la salud pública”. Asimismo, recordemos que fueron ellos, los que desde inicios de esta pandemia, recomendaron la utilización de las pruebas rápidas, las mismas que hoy están dando falsos negativos en nuestro país y el mundo entero. Y es que, como vemos, el comunismo no tuvo mejor escenario que este año 2020, no sólo porque tenía a un militante liderando la OMS, sino también porque es el año de las elecciones estadounidenses, donde seguramente tendrán el claro deseo que Trump no vuelva al poder.

A todo esto, ya son varias las potencias en el mundo las que están despertando ante esta situación, las que junto a Estados Unidos vienen reclamando a China sobre su sospechoso manejo de esta pandemia; países como Japón, Francia, Reino Unido, Australia y ahora último Alemania. "No seamos tan ingenuos", expresó Macron, presidente de Francia, “claramente pasaron cosas que desconocemos", advirtió. Por su parte el ministro británico de Relaciones Exteriores dijo que el gobierno Chino deberá responder "preguntas difíciles". A estas declaraciones se suma la vertida por el canciller brasileño, Ernesto Araujo, quien señaló que: "Transferir poderes nacionales a la OMS, bajo el pretexto (¡jamás comprobado!) de que un organismo internacional centralizado es más eficiente para lidiar con los problemas que los países actuando individualmente, es apenas el primer paso en la construcción de la solidaridad comunista planetaria”.